En la sesión del Comité de Capital Humano, se examinó la prevalencia de los trastornos mentales, especialmente en el contexto laboral, subrayando la urgencia de abordar este tema como una prioridad.

Durante la sesión de Capital Humano y Asuntos Laborales del Capítulo Monterrey, César Izazola, Director de Business Solutions de Workplace Options, junto con Lina Roxana Meneses, Psicóloga certificada en NOM 025, destacaron la importancia de la salud mental como componente esencial del bienestar de los individuos, tanto en el ámbito laboral como personal.

La magnitud del problema de los trastornos mentales es alarmante, con más de 350 millones de personas afectadas globalmente. La depresión y la ansiedad generan una pérdida significativa de productividad, con más de 12,000 millones de días laborales perdidos. El suicidio, siendo la segunda causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años, refleja la urgencia de abordar este problema de salud pública con acciones efectivas

En el caso de nuestro país, la fuerza laboral mexicana enfrenta altos niveles de estrés, con un aumento del 30% en la prevalencia de ansiedad y depresión durante la reciente emergencia sanitaria. Cerca del 75% de los trabajadores experimentan fatiga por estrés, y alrededor de 15 millones padecen trastornos mentales relacionados con el trabajo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) han instado a implementar medidas concretas para abordar estos problemas.

Es por ello, que el concepto de salario emocional cobra relevancia; la satisfacción laboral esta estrechamente relacionada con la retención de empleados y la productividad. La inversión en salud mental, estimada en hasta el 7.3% de la nómina de una empresa, tiene un retorno significativo, con cada dólar invertido en generando cuatro dólares de retorno. Además, proporcionar asesoría emocional y adoptar modelos de trabajo híbridos pueden mejorar el bienestar y reducir el estrés laboral.

La salud mental es un aspecto crucial que impacta en la productividad y el éxito organizacional. Al invertir en programas de salud mental y promover entornos laborales saludables, las empresas no solo mejoran la calidad de vida de sus empleados, sino que también obtienen beneficios económicos y sociales a largo plazo.

AMERICAN CHAMBER/MEXICO
Monterrey | 30 | enero | 2024)